Luego de terminar la relación con su prometido, Jason Trawick, y protagonizar varias crisis emocionales en el último tiempo, su nuevo tutor, Jamie Spears, será mucho más estricto con las licencias que le da a la cantante.
De hecho, su también padre impedirá que Britney de rienda suelta a los excesos por lo que, aún viviendo en Las Vegas, la estrella pop será vigilada todo el tiempo.
"Britney no tiene permitido en absoluto jugar y no puede llevar a nadie a su suite del casino", declaró una fuente cercana a la artista.
"Realmente estarán monitoreando su conducta y estado de ánimo para asegurarse de que se siente bien y lista para las difíciles horas de trabajo cada noche", comentó el informante, quien añade que Spears tendrá que lidiar a diario con un servero equipo de seguridad.
CREDITOS: http://entretenimiento.terra.cl/
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